martes, 2 de diciembre de 2008

Adolescencia : Una etapa de cambios


Los expertos, en su mayoría, creen que la idea de que los adolescentes son regidos por las "hormonas descontroladas" es una exageración. Sin embargo, esta es una edad llena de cambios rápidos en su estado emocional, el mal genio y una gran necesidad por la privacidad, así como la tendencia a ser temperamentales.

Los niños pequeños no pueden pensar en el futuro demasiado, pero los adolescentes sí pueden y suelen hacerlo con frecuencia lo que lo que da como resultado que se preocupen por el futuro. Algunos podrían preocuparse excesivamente como por ejemplo en:

  • su rendimiento en la escuela;
  • su apariencia, su desarrollo físico y su popularidad;
  • la posibilidad de que uno de sus padres fallezca;
  • ser hostigados en la escuela;
  • la violencia escolar;
  • no tener amigos;
  • las drogas y el alcohol;
  • hambre y pobreza en el país;
  • fracaso en obtener empleo;
  • bombas nucleares o ataques terroristas en el país;
  • el divorcio de sus padres; y
  • la muerte.

Muchos adolescentes son un poco cohibidos, además suelen ser muy sensibles sobre sí mismos, dado que los cambios físicos y emocionales son drásticos. Quizás se preocupen por algunas cualidades personales o "defectos" que para ellos son algo muy importante, pero que para otros son inconsecuentes.

Ellos piensan: "No puedo ir a la fiesta esta noche porque todos se van a reír de la espinilla tamaño pelota que traigo en la frente."

Realidad: La espinilla es pequeñita y la esconde el cabello.

Un adolescente también puede estar bastante absorto en sí mismo. Puede creer que él es la única persona en el mundo que siente como él, o que tiene las mismas experiencias, o que es tan especial que nadie más, especialmente su familia, lo puede comprender. Esta creencia puede contribuir a los sentimientos de soledad y aislamiento. Además, el enfoque en sí mismo puede afectar la manera en que el adolescente se relaciona con familiares y amigos. "¡No puedo soportar que me vean salir al cine con mi mamá!"

Entonces, ¿Qué podemos hacer nosotros como maestros para ayudarlos en sus conflictos?

Tanto los maestros como los padres tenemos una función importante en el desarrollo del adolescente, mas no la misma nosotros los maestros debemos estar atentos a las conductas que ellos puedan tomar y a las reacciones que puedan tener para asi brindarles una orientacion o llegar mas a ellos, ademas de ser comprensivos y entender alguna posible conducta inadecuada, pues es propia de la edad


1 comentario:

Anónimo dijo...

El crecimiento de los adolescentes es toda una aventura; que mejor que estar allí para acompañarlos.

Muy interesante.